Hola Amigos, La vida es dejar enseñanzas, tender puentes y dar sin esperar a recibir.
Esta semana hemos llorado con lágrimas que salieron desde la cueva más profunda de nuestra alma, pero no eran lágrimas tristes porque cumplimos un sueño y un sueño acaba bien cuando te hace soñar mucho más. Un grupo de enanos hace seis años nos empezaron a hacer soñar y el viernes nos despertaron del sueño comprobando que los sueños, a veces, se hacen realidad. Hace seis años soñamos que estos enanos se formaran para la vida, hoy seis años después el sueño se ha cumplido, están lanzados y formados y mucha parte de la culpa la ha tenido ese loco deporte llamado HANDBALL.
Esta semana hemos perdido el partido, pero hemos ganado el campeonato de la vida. Porque la vida no se mide por la cantidad de momentos vividos sino por la calidad de los mismos.
Esta semana termina una de las etapas más bonitas de vida de Alberto, un momento que marca, un momento que da vida, un momento que explica la vida, un momento que genera vida, un momento que le da sentido a la vida.
Hace años suspiré porque se formara como persona integrado en un equipo, practicando un deporte, porque considero que un equipo es lo más parecido a la vida, donde hay que luchar todos juntos, donde un día estas bien y otro mal pero siempre estará algún compañero para ayudarte, donde unos trabajan para que otros brillen, donde hay que respetar a una autoridad que, incluso cuando te abronca, esta deseando sacar lo mejor de ti. Un equipo donde siempre vas a tener gente detrás que te amará como la propia vida. En definitiva el esfuerzo diario para avanzar con un colectivo.
Llegó hace seis años al grupo, siendo el pequeño de todos, pero desde el minuto uno sintió que ese era SU EQUIPO, se integro porque en ese grupo humano había mucha genética, inteligencia y buen respaldo. Desde entonces, ha trabajado para acabar disfrutando dentro de la pista lo que disfrutó fuera desde el primer minuto. Y nadie dejó de creer en el, porque nunca puedes dejar de creer en un niño si el cree y trabaja para mejorar. Y vaya si ha mejorado, ahora CORRE CON EL ALMA Y DEFIENDE CON EL CORAZÓN.
Hasta aquí dos sectores ganados y dos campeonatos de España, pero lo que mejor recordará Alberto no son los partidos ganados, sino lo amigos ganados, las experiencias ganadas, las situaciones vividas, el máster de vida que ha aprendido dia a dia.
El viernes jugaron su último partido juntos, el destino les tenía guardado un partidazo, pero no hubo partido deportivo y sí hubo partido emocional. Un mar de lágrimas que se convirtieron en un río cuando el arbitro pitó el final. El grito 1,2,3, PRADO sonó con menos fuerza que nunca, las gargantas estaban inundadas, pero el alma se mostró más orgullosa que nunca, habíamos perdido el último partido pero hemos ganado unos hombres lanzados y formados para la vida, un grupo humano competitivo, pero humilde, con garra, pero noble, que han entendido que la vida es un grupo donde cada hombro aporta a un colectivo y que se puede ser feliz sin ser el mejor.
El viernes hubo una mezcolanza de situaciones por nuestras cabezas y cuerpos que recorrieron cada poro del mismo para alimentarnos de recuerdos y de lágrimas.
El viernes lloramos, pero no acabamos tristes porque cumplimos un sueño y un sueño acaba bien cuando te hace soñar mucho más y con estos chicos seguiremos soñando mas porque están ganando el partido de la vida.
Ese vestuario, inundado de lagrimas, de cariño, de melancolía…tardará en olvidarse de mi mente. Guardo ese recuerdo en la biblioteca de los favoritos, porque cuando el alma llora, la sinceridad se apodera del momento y libera de sensaciones el cubo de la vida. Guardo en mi cabeza la valentía de mi hombrecito liberando sus sentimientos como solo hacen los grandes, porque tienes que ser muy grande para decirles a ellos, a tus amigos que han sido referentes en tu vida y el lo hizo desde lo más profundo del corazón, eso te hace muy grande pequeño.
Y a partir de ahora cada uno seguirá jugando en un destino diferente, ganando partidos y campeonatos pero no podrán ganar las sensaciones y momentos de complicidad vividos en una adolescencia deportiva como la que han vivido.
A nosotros nos queda un último año escolar, un ultimo año de pretemporadas, campeonatos y, espero, que sectores donde en la cancha ganaremos partidos y, espero, campeonatos, pero donde no podremos seguir ganando el partido más importante que hemos disputado este año. Porque Alberto este año ha ganado un EQUIPO, SU EQUIPO….
A todos los que habéis y hacéis posible este lindo sueño, GRACIAS. A ti Alberto INFINITAS GRACIAS por permitirnos vivirlo y tocarlo.
1,2,3,…..PRADOOOOO.
0 Comments