Dicen que la vida empieza y acaba, dicen que las cosas bonitas empiezan y acaban … dicen que el ser humano estamos preparados para ver el principio pero nuestra cabeza no asume el final.
Se ha terminado una de las etapas más bonitas en la vida de Alberto, su balonmano, su equipo, su Marianistas, su escudo, sí SU ESCUDO, su formación como persona a través del deporte. Se termino, ahora empezarán otras seguro que preciosas, pero la carga sentimental y emotiva que deja esta etapa será inolvidable y difícilmente repetible.
Termino una etapa preciosa de su vida, la ETAPA, y aunque hace un año en Málaga contra Granollers fue el final sentimental ahora ha sido el final físico. Hace un año sentía que no iba a volver a jugar con ese equipo con SU EQUIPO, ahora el sentimiento es que no volverá a jugar con ese escudo CON SU ESCUDO.
Se cierra una etapa preciosa, que empezó muy atrás, con muchas dificultades, con inseguridades, con miedos, con la soledad de elegir un deporte contrario al resto de amigos. Demasiados muros, que había que atravesar, pero poco a poco saltando uno y luego otro, con mucha ayuda interna y externa fuiste haciendo camino. Pronto grabaste en el disco duro la idea de trabajar, trabajar y trabajar, pero también grabaste el respetar, respetar y respetar y eso te quedará para siempre.
En este tiempo muchos momentos se quedan en mi memoria, muchos recuerdos, el mopa del Caserío, tu primer viaje a Córdoba, tus lágrimas en Cádiz por la impotencia de tu expulsión, el ultimo minuto de Toledo, tu primera defensa con tu Caserío…. hay muchos y muy bellos momentos pero permíteme que elija tu mano al escudo celebrando aquel gol en Pozuelo mirando a la grada, gritando al mundo que estabas orgulloso; tu defensa el primer día del sector de Ciudad Real, ese día que sentías ser ejemplo para todos y en tu casa y el último partido de Málaga, aquel día donde afloraron todos los sentimientos y todas las lagrimas sabiendo que era el ultimo partido del equipo, DE TU EQUIPO. Estos tres momentos estarán en mi cabeza y en mi corazón para siempre
Has ganado muchos campeonatos, has jugado sectores, campeonatos de España, pero tu mayor triunfo sin duda, los amigos que te llevas, dentro y fuera del equipo (habitación 148), el respeto de quien te ha tratado, desde compañeros a entrenadores, te podrán discutir un gol fallado o una mala defensa, pero no hay nadie que opine mal de tu entrega, de tu comportamiento con los tuyos y con los rivales, y del amor a tu escudo. En estos aspectos has dejado un legado que se podrá igualar pero será muy difícil superar.
Hace un año en la fiesta despedida te dije en voz alta (como padre orgulloso) que si yo fuera Director del Colegio te pediría que le contases tu experiencia a los chicos que están empezando, para que vean que no solo llegan los mejores, los que más calidad tienen, sino que la vida hace hueco a los que le dedican pasión, humildad y respeto a su trabajo. Hoy volvería a gritárselo al mundo porque, aunque no lo creas, enseñas.
Se acaba una etapa, comienzan otras …. permiteme que le grite al mundo que estoy orgulloso, que nadie es vital para vivir, pero si muy importante, que tu a tu manera, te haces importante para cualquier entrenador o equipo (deportivo y humano) por lo que haces y por como lo haces y que por favor NO CAMBIES NUNCA.
#SONRI3
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