“Los caminos difíciles siempre llevan a destinos hermosos”

Termina un año más, un 2021 lleno de dificultades pero un año en el que se demuestra una vez más que los caminos difíciles llevan a destinos hermosos, porque este año de camino difícil, nos ha llevado a destinos muy hermosos. 

El  pasado sábado dia 4 hacía 25 años que la vida me dio una segunda oportunidad, el domingo 5  terminé mi cuarta maratón, en un año donde completé dos maratones de asfalto, la OCC en Mont Blanc (58km de interminables montañas) y un casi quinto Genal. Hace 25 años (sin buscarlo) la vida me dio un aviso, me recordó que los caminos serían difíciles, me recordó que si no aprovechas tu momento, si no consumes vida, si no das sin esperar a recibir, si no ríes a diario, si no …todo te arrollará a una gran velocidad que hará tu existencia un sinsentido. Hace 25 años, le hice caso a la vida y me prometí que no me daría más toques de atención. 

Hace 7 años en el camino de mi vida apareció el running como una bendición, ese deporte que me ha regalado momentos de vida, momentos de pasión, momentos de respiro, momentos de amistad, momentos de familia, momentos….. ese deporte que me llena el deposito, físico, mental y emocional. 

Ese deporte que me ha regalado otro año totalmente inimaginable hace 25 años cuando el camino que iniciaba era difícil, pero que se ha convertido en un destino hermoso, otro año deportivo y emocionalmente inolvidable. Ese deporte que nos ha permitido crear un lazo irrompible con mi chiquitín, compartiendo pasión, compartiendo vida….verle atravesar esa meta de mi Genal será uno de los mejores momentos de mi vida, esa sonrisa en su cara, ese momento de satisfacción…. #Sisetrabajaysecreesepuede

Ese deporte que me ha permitido conocer, ser parte y ayudar a un tío tan grandísimo, con una cabeza tan privilegiada que ni el mismo puede imaginarse, un tío grandísimo donde se esconde un niño con muchos muros. Un niño que se ilusiona derribando esos muros, venciendo a sus miedos y disfrutando sus emociones, pero que necesita mucha ayuda para hacerlo y, aunque a veces es muy difícil ayudarle, cuando ocurre es una satisfacción enorme. Y después de subir montañas de todo tipo, incluidas las más duras de Francia,  el running me regaló el privilegio de estar ahí para derribar uno de sus mayores muros los 42,195 k, para cumplir una de las mayores ilusiónes que tenía ese niño. Y  tuve el privilegio de estar en el día que el niño recibe a los Reyes Magos por primera vez, y pude ver la sonrisa de ese niño, una sonrisa que se repetirá muchas veces, porque el muro ya esta derribado, pero la primera sonrisa es especial y yo tuve el privilegio de formar parte de ella.  Esos 800 metros finales en la alfombra azul de Valencia los recordaremos toda la vida.(@ferbc)

Ese deporte que me ha permitido conocer y sentir al niño más travieso del campo de Calatrava, detrás del que se esconde un hombre sensible, que le encanta expresar sus sentimientos una y otra vez y que cada vez que lo hace sigue emocionando. ¿The last dance? La vida nos ha regalado algo muy bonito, tenemos que consumirlo. (@espiosus)

Ese deporte que nos permite sentirnos arropados por las mejores mujeres del mundo, del planeta, del universo, esas que no se cansan de estar en todos los kilómetros detrás de nosotros, de gritar de alegría una y otra vez cada vez que nos ven llegar como si fuera la primera vez; esas que sufren y se desencajan cuando nos ven sufrir, haciendo suyo el sufrimiento; esas que lloran en cada meta de alegría, de orgullo…. No Words…. Thank You. 

Ese deporte que me ha regalado un año inolvidable, con una maratón con mis compañeros y amigos de mi familia MAPFRE, ese deporte que me ha regalado un viaje de ensueño a Chamonix para participar en el mejor y más duro Trail del Mundo (OCC) en esas montañas tan altas como extraordinariamente bellas, donde alguien extremadamente bello me enseño que el presente es lo único que no pasa (gracias eternas Angelete y @teteapi ); en un viaje con un grupo humano soñado pero real. Ese deporte que me volvió a llevar (por 5ªvez) a mi valle, a mi Genal y que sin pensarlo me regaló un momento único y convirtió un mal día deportivo en un inolvidable día emocional con el Finisher de Alberto. Ese deporte que me ha permitido llegar a Fisterra con una familia 10 (gracias @Nachete). Ese deporte que me ha permitido llegar a la alfombra azul de Valencia con dos AMIGOS de un nivel incalculable y con una familia en la grada emocionalmente insuperable. 

¿The last Dance? Hace 25 años años la vida me recordó que el camino sería muy difícil pero que “los caminos difíciles llevan a destinos muy muy hermosos”. 

#SONRI3

#RENDIRSENOESUNAOPCION