Hola amigos, os he dicho alguna vez que una de las tres cosas que más me apasionan en esta vida es viajar, conocer nuevos territorios, nuevas culturas, nueva gente y conocer otras tierras?. Pues si, viajar lo considero como una de las cosas que deja en tu ser sensaciones y vivencias que hacen tu vida más rica en todos los aspectos.
Y si encima puedes viajar con los que más quieres es una pasada.
Por ello llevamos tres años aprovechando nuestras navidades para conocer nuevos paises en viajes cortos pero intensos, muy muy intensos. Si hace tres años fue Londres la ciudad que me maravillo, hace dos fue París, este año ha tocado Roma.
Roma, la bautizada ciudad eterna, me ha encantado por muchos motivos pero por ninguno en concreto, me he sentido bien, hemos aprovechado todos y cada uno de nuestros minutos en la Ciudad y sin duda, ha valido para cargar nuestras cabezas y Nuestros cuerpos con energía muy muy positiva para afrontar un año que se presenta intenso.
Lo primero que llama la atención en Roma es ver el contraste de una ciudad muy cultural, pero con una presencia muy numerosa de soldados en las calles. Sin duda, viajando te das cuenta que estamos viviendo en un mundo muy amenazado donde la sin razón se ha instalado de manera definitiva y donde sientes que no estás a salvo en ningún lugar. La presencia tan numerosa de soldados da que pensar y mucho que este mundo en el que vivimos está deshumanizado por completo.
Dejando aparte esta circunstancia Roma se disfruta mucho andando, se anda mucho pero bien, porque en cada calle por la que pasas hay algo que llama la atención por su belleza arquitectónica, por su encanto o por su cercanía.
La Fontana de Trevi me ha encantado, por su ubicación, por su encanto y porque destila alma; el Partenón me ha sorprendido por su majestuosidad, esas columnas y esas puertas impresionantes; el Coliseo te deja sin palabras y te traslada a las películas que todos hemos visto y disfrutado y por último El Vaticano es un lugar con una grandeza impresionante.
Desde todo ello hasta los pequeños detalles del encantador Barrio de Trastevere o los restaurantes italianos con una cocina de éxito garantizado hacen que pasear durante horas y horas, aunque sea con frío, te genere sensaciones de bienestar necesarias cada cierto tiempo.
Y como no podía ser de otra forma, antes de volver, ponemos otra pica en ciudades donde hemos corrido y de nuevo hicimos turismo-running. Si no lo habéis probado y os gusta el Running, os aconsejo que no dejeis de calzaos vuestras zapas en estos viajes y os deis una vuelta en El Centro de la ciudad, es una pasada. Yo comencé a hacerlo en París, yo solo, y esta vez lo volvimos a hacer todos juntos, this is different.
Vuelta a casa, pilas cargadas, ganas a tope, cabeza limpia y moral por las nubes, he disfrutado 4 días de los que más quiero, con la tranquilidad de ir todo bien y llenando nuestro depósito de sensaciones positivas.
Sí, os lo confirmo, Roma es una ciudad eterna….
Y recordar #SONRI3 #RENDIRSENOESUNAOPCION
4 Comments
Completamente de acuerdo con que viajar te enriquece como persona...es uno de mis objetivos este año, empezar a programarme al menos un viaje interesante al año...solo se vive una vez y es una pena no conocer este maravilloso planeta que nos acoge.
tu eres joven....tienes tiempo aún
Preciosas fotos...Reconforta leerte...Besos
Te quiero